Una mirada al audiovisual nariñense en 2010

“En Bogotá se hace cine por rutina, en Calí es cerebral, de tesis, cinéfilo y los paisas con las tripas, por puro instinto.

Salvo en algunos artistas veteranos de provincia, la cultura regional sólo se manifiesta hoy en la imagen audiovisual como temática; no hay una expresión suya propiamente característica, emanada de los ritmos, de las texturas autóctonas, sino que esa imagen se traga lo que en ella aparece y a duras penas la traduce en algunos de sus códigos, uno de los cuales es la chambonería –o al menos la carencia de recursos”

El audiovisual en Antioquia (Santiago Andrés Gómez., Revista Extrabismos 2009)

 

¿Curiosidad, Memoria, Historia?

Recordando estas palabras de Santiago Gómez, surge la pregunta ¿Por qué filman los nariñenses?  De entrada es posible decir que por curiosidad, quizás por esa forma inquieta de representar situaciones anecdóticas, curiosas, graciosas, extrañas. Por tanto el realizador a través de la cámara y de su narración indaga en mundos o situaciones que le despiertan curiosidad. Luego también aparece el intento de hacer memoria y porque no reconstrucción de la historia, tanto desde el campo de la ficción como también del documental, la animación y el experimental.

Esta mirada es una visión fragmentaria y subjetiva de aquello que se logra visibilizar desde nuestra perspectiva de las expresiones del audiovisual nariñense en los últimos años. Por supuesto hay varias obras en cortometrajes, documentales, largometrajes, así como también en entidades y proyectos relacionados con el cine en Nariño, que se nos quedan por fuera, no por falta de interés, sino de conocimiento.

El Camino

Las vías que se encuentran en este panorama del audiovisual sin duda pasan por algunas entidades privadas o mixtas así como el esfuerzo independiente de algunos realizadores. En esta instancia es el Fondo Mixto de Cultura de Nariño uno de esos importantes caminos ya consolidados en las ultimas dos décadas en esta región. Pues ha impulsado la formación, construyendo proyectos viables para traer programas como INI Imaginando Nuestra Imagen en 6 versiones, 4 en Pasto, 1 en Tumaco y 1 en Ipiales. A través de estos procesos aproximadamente se ha estimulado la proyección de 240 nuevos realizadores aproximadamente.


También se ha impulsado la realización desarrollándose 12 cortometrajes solo a través de estos procesos. Es así como muchos de los equipos conformados en INI en Nariño posteriormente han tenido uno o más proyectos de realización conformándose como equipos de trabajo o productoras audiovisuales. Por otra parte se ha estimulado la divulgación trayendo muestras nacionales como la Muestra INI con el apoyo de Cineztesia o apoyando al Festival de Cine de Pasto. Así como también con talleres y conversatorios como los desarrollados con el Productor Juan Pablo Tamayo o el Documentalista Luis Carlos Urrutia o la organización del I Encuentro del Sector Audiovisual Nariñense.
Por ultimo es un camino para la producción audiovisual a través de la realización de Series Documentales como son: “Sumando Somos Más”, “Ser en el Sur” o “Tras la música oculta de Nariño” y apoyando diversos cortometrajes y documentales en la región.

Otra vía del audiovisual nariñense es la Universidad de Nariño a través de proyectos de diferentes dependencias de esta institución. Por una parte esta la Maratón 3D que llega a su segunda versión en 2010, promoviendo la realización audiovisual en Pasto, llegando a recibir casí 80 cortometrajes en 2 años.  Este proyecto es parte de la Unidad de Medios de la Udenar. De esta misma sección universitaria surgen productos de televisión regional como el Magazin “Cauchola” (Alberto Vega) o el programa de investigación académica “Arké”Diplomado de Cinematografía en Construcción (Juan Ignacio Rosero) que han sido nominados a los Premios India Catalina de Colombia. También esta el con una primera versión entre 2009 y 2010 coordinado por Beto Moncayo, como un proyecto de larga gestión a través del cual, se brindo a un grupo de jóvenes realizadores, herramientas de composición audiovisual quizás algo más elaboradas que las de un Taller de Imaginando Nuestra Imagen. De ahí existen 6 nuevos cortometrajes que tocan diversos géneros y temáticas, pero sobre todo un grupo de aproximadamente 25 realizadores con un importante impulso para la realización.

Otra ventana importante de la realización es el Festival Internacional de Cine de Pasto, a través del cual el realizador nariñense encuentra una cita anual permanente para proyectar su trabajo pero también para nutrirse del trabajo de realizadores del país y fuera de el. Por otra parte la Gobernación de Nariño abrió durante 2 años consecutivos convocatorias sobre documentales acerca de personajes nariñenses.

Más alla del espacio regional definitivamente es el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico del Ministerio de Cultura una plataforma que ha posibilitado algunos proyectos como los cortometrajes “Emiliana Calle” (Dario Villota) o “La Canción del Sendero” (Victor Hernández), y el largometraje en fase de post producción “Jardín de Amapolas” (Juan Carlos Melo), así como también el mismo Festival de Cine de Pasto. En suma el Ministerio de Cultura a través de este Fondo también resulta un viabilizador del audiovisual nariñense, tanto mediante las convocatorias del FDC, el programa INI y el reciente Diplomado en Documental que se realizará en Tumaco.

En conclusión es posible decir que entes mixtos como el Fondo por ejemplo muestran un balance positivo promoviendo el audiovisual nariñense y que seria necesario brindarle más apoyo por parte de los entes públicos así como también privados. Del mismo modo se hace necesario proyectar en entes o instituciones nariñenses ya sean de carácter privado o público, que es posible a través de diferentes convocatorias y proyectos promover el audiovisual tomando esta experiencia como un referente. También es posible decir que los modelos mixtos muestran también una óptima vía en este campo en el departamento de Nariño.

Las muestras son un excelente vehículo para promover la realización, de ahí que es importante que se multipliquen estos espacios, como muestras de filminutos, cortometrajes, documentales, video artes, video clips, universitarias, colegiales, en suma ventanas de exhibición y a la vez de promoción del audiovisual nariñense en sus diferentes formatos.

Los procesos de formación en cine o video realizados en Nariño a través de INI, talleres o diplomados necesitan mantenerse y además ampliarse tanto en sus fases de duración como de profundización del conocimiento cinematográfico. Es importante que diplomados como el de la Universidad de Nariño puedan mantenerse y evolucionar, así como también viabilizarse procesos similares en otras universidades.

La gestión en Nariño para el audiovisual ha tenido un proceso creciente en lo local, regional y nacional, de ahí que es importante que espacios como el Consejo Municipal de Cultura o el Consejo Departamental de Cinematografía y Audiovisuales de Nariño se integren de manera activa y propositiva con el sector audiovisual nariñense a través de planes, proyectos o propuestas específicos y viables a corto y mediano plazo.


Aparte de estos escenarios públicos de consejería y gestión también es necesario que se consoliden productoras mixtas o privadas para canalizar recursos y proyectos de diversa índole. Además de la formación audiovisual se hace necesaria una amplia capacitación en el diseño y elaboración de Proyectos Cinematográficos de cara a las diferentes convocatorias, en especial las del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico.

El Huerto

De donde se nutre o surge la realización nariñense, o más específicamente en Pasto, donde se motiva a los jóvenes realizadores. La verdad es que surge de fuentes bastante limitadas, quizás de la curiosidad misma de un campo nuevo por ser explorado. Sin embargo existen algunas especie de lugares de donde puede brotar como son las universidades en algunos programas donde se estimula de alguna manera la realización. En la Universidad de Nariño se encuentran ubicados en la Facultad de Artes, en programas como Artes Visuales o Diseño Gráfico, así como también en los Talleres de Formación Humanística como son “Cine y Sociedad“, “Cine y Musica“, “Cine, Literatura y Psicoanálisis“ o “Apreciación Cinematográfica“. Igualmente existen espacios de divulgación como Séptima Aula, Cine Clubs universitarios como Ocho y Medio. Por otra parte en la Universidad Mariana en la Facultad de Comunicación Social existen materias de apreciación cinematográfica y de producción audiovisual en argumental y documental. También han existido procesos a nivel de secundaria en instituciones educativas como el INEM de Pasto con José Alberto Santacruz, donde se produjeron diversos cortometrajes.

Es una fuente muy exigua, sí se compara, con una producción en los últimos dos años únicamente, de aproximadamente 130 cortometrajes, de los que se tiene una información general. De ahí que es posible decir que la mata del audiovisual prende rápidamente en Nariño o con cierta facilidad. De ahí la necesidad de ampliar estos mínimos campos de formación o promoción o fortalecerlos.

Es muy sencillo apreciar que la Universidad de Nariño es una fuente con diversas aristas preocupadas por el audiovisual, sin embargo cabe señalar que se constituyen muchas veces en esfuerzos aislados o que no terminan por integrarse de una manera solida. Esta claro que hay diversos intereses, preocupaciones, proyectos en este campo que cuentan con algún apoyo institucional, y es ahí donde se recomienda que se construya una visión desde esta universidad hacia el audiovisual y emanada de ella, políticas educativas frente a ella. Hay diplomados, cine clubs, programas de televisión, cortometrajistas, animadores, una videoteca, una programadora de televisión regional, una maratón de cortometrajes y una muestra universitaria de cortometrajes anual, talleres de formación humanística, entre otros. Políticas pedagógicas y educativas frente al cine de parte de esta universidad podrían converger en la creación de un programa de cine pero también en la cohesión de estos diversos proyectos hacia objetivos y metas comunes y que puedan facilitar mejores rumbos al audiovisual universitario y por ende al audiovisual regional.

Las Montañas 


Y que es lo que se ve de fondo, lo que sobresale del audiovisual, los cortos, algunos largos, sus historias, sus personajes. Entre 2009 y 2010 se tiene información de aproximadamente 130 cortometrajes realizados en Nariño, 10 realizados por nariñenses fuera del departamento. Además de 8 mediometrajes y 2 largometrajes.

En ese paisaje de historias se observan algunos temas constantes en distintas versiones como son:

La Inocencia Pérdida 


El campo nariñense es retratado con alguna asiduidad en diversas historias y formatos como un lugar de nostalgia por la inocencia perdida por causas de la violencia, el desplazamiento, el desempleo, la extorsión, incluso el tema específico de la violación tratado en 2 cortometrajes como Espiritu Burlón (Oscar Guerrero) y Luna Llena sobre Nubes Verdes (Juan Esteban Cabrera) y 1 largometraje como Una y Otra Vez (Ricardo Islas). Símbolo de esa pérdida de inocencia de ese Nariño de postal de antaño y del renombre de Ciudad Pacífica a Pasto. Es ahí donde se ve como los realizadores retratan ese Nariño perdido, que no se sabe muy bien que es ahora para sus personajes. Ahí están cortometrajes como La Canción del Sendero (Victor Hernández), En la boca del gato (Julio Cesar Luna), Las Quernejas de Dolores (Danny Benavides), El Sospechoso (Dirección: Dario Villota, Producción y Guión: David Villareal), El Doctor de Paja (Cristian Flores), Fragil (Andrés Acosta, Giovanny Insuasty y William Lucero), entre otros. Luego esa cierta inocencia invadida se contrasta con la migración hacia la ciudad donde se escenifica el extrañamiento y el choque del campo con lo urbano a través del personaje desplazado.

La Memoria 


La historia de Pasto y de Nariño no ha sido contada en lo audiovisual, escasamente hay material en lo literario gracias a textos académicos, crónicas e investigaciones que en su mayoría son de la última década. De ahí que el realizador se lanza detrás del lente a reconstruir una memoria histórica a veces, como en Rocambolesco Amor (Diana Moreno), Tiempos de Amor y Muerte del (Grupo Los Trastes), Alerta Roja (Santiago Moncayo) o en Los Huesos de Agualongo (Jaime Enríquez). Una memoria mítica también como en El Basílisco Andino (Felipe Insuasty), una de las primeras y escasas realizaciones que buscan acendrase en lo mítico, en lo prehistórico de Nariño. Una memoria más familiar quizás como en Aprendiz de Hombre (Darío López), memoria de tradiciones orales en Las Quernejas de Dolores, El Canto Creador del Gallo Saratano o El que peca y reza (Carolina Solarte).

Este es un territorio en el que existe una gran curiosidad por seguir indagando y contando historias y que debe buscarse la posibilidad para desarrollar proyectos que pueden tener apoyo de diversas instituciones.

La Ciudad

Una ficción fragmentaria sobre la ciudad llena de relatos inconclusos, equívocos, anecdóticos, inconexos, donde ronda lo absurdo, el extravío, algunos matices oscuros, algunos vacíos. En general es una ciudad que en la ficción del cortometrajista no parece ser del agrado de los personajes ni del realizador. Es un tema incluso que no parece ser el preferido por el realizador, cuando es abordado, lo es desde una perspectiva crítica.

Cuenta de lo anterior dan cortometrajes como En clave de mí (Jaime Flores), Sin Regreso (Alberto Vega), Breve relato de amor y muerte (Juan Esteban Cabrera), Amistad, Superstición (Alvaro De la Cruz), El viaje del Carnacolito, Fragil, Muerte S.A. (Freddy Guerrero), Una historia antigua (Diego Izquierdo), Los zapatos de Sofía (Alvaro Moreno) y El último hechizo (Michael Stevens).

Sin embargo existen historias que aunque conservan ciertas características mencionadas anteriormente contienen visiones de la ciudad algo más positivas como son El Viaje del Carnacolito, Las Chanclas (Israel Rodríguez) o Aviso Previo (Freddy Guerrero).

Ventanas Documentales de la Región

En el terreno documental observamos por un lado una influencia televisiva, con reportajes sobre temáticas regionales, para darlas a conocer, a las mismas y a la región, frente al país o al mundo.

Temas como la Chaza, el Barniz, el Chigualo, las Artesanías, los Colectivos Coreográficos o el Carnaval de Pasto, el Volcán Galeras, las Reservas Naturales como La Laguna de La Cocha. Las artes y prácticas tradicionales autóctonas, los escenarios regionales naturales.

Ventanas para mostrar a gente de la región común en sus talleres, sus rituales, sus ensayos, sus estudios.

El oro, el barniz, el papel mache, la espuma, la danza, el teatro, el mopa mopa, un estilo artesanal de frecuente y virtuosa realización en Nariño.

Existen también ejercicios de registro de eventos culturales episódicos que se suman a una especie de postales o promocionales.

Por otro lado hay investigaciones sobre procesos artísticos, artesanales, científicos.

Hay a la par documentales urbanos, y también un interés proyectado hacia lo rural. Quizás la Serie Ser en el Sur para televisión, del Fondo Mixto de Cultura de Nariño y Señal Colombia, con sus diferentes capítulos es una de aquellas muestras de documentar lo urbano o Carros Alegóricos (Julio Cesar Goyes). Sin embargo Chigualo (Juan Camilo Castillo) o Los Relatos de David Los Habitantes del Bosque de Niebla (Victor Hernández) son claras pruebas del interés por documentar el campo, con su tiempo, la idiosincrasia de sus gentes y sus ambientes.

La animación: Video Filigranas

Existe todo un gran talento y necesidad por expresarse en formatos experimentales y en la animación en Nariño, como lo reseñaría acertadamente Felipe Moreno Salazar en el Festival de Cine de Pasto 2009, sin embargo pasamos de esa ronda, para tratarla ampliamente en otro momento.  Solo es importante destacar como la animación en cortometrajes nariñenses, aunque no totalmente experimental, encuentra reconocimientos a nivel local y a nivel nacional. Por ejemplo Instrucciones para subir a una escalera (Diana Moreno, Miguel Jurado y John Cortez) obtuvo la Mención Especial del Jurado del Festival de Cortometrajes del Espejo. Espiritu Burlón (Oscar Guerrero) fue ganador del Mejor Concepto de Diseño de la Muestra Latinoamericana de Animación LOOP. Fetus in Fetu (Arturo De la Cruz) recibió el reconocimiento a Mejor Video Clip y Experimental en la MUDA Muestra Universitaria de Audiovisuales. Estos tres reconocimientos a nivel nacional son quizás los únicos conocidos que se hayan concedido a proyectos audiovisuales nariñense culminados. Por otra parte en 2010 un cortometraje animado y experimental como El Basílisco Andino (Felipe Insuasty) obtuvo el Premio Sol de Los Pastos a Mejor Cortometraje Nariñense y la Mención a Mejor Animación en el Festival de Cine de Pasto. Este mismo año y meses antes Tiempos de Amor y Muerte del Grupo Los Trastes con otra animación obtuvo el primer puesto en la Maratón 3D de la Universidad de Nariño. Por último Tecnopornolingus (Alvaro De la Cruz) una animación experimental en stop Motion logró también ganar el Premio Sol de Los Pastos a Mejor Corto Experimental, obteniendo así un reconocimiento en el cual competía con cortos nacionales e internacionales.

Algún amigo me dijo hace algún tiempo, ahí donde hoy esta el animador hoy en día, estaba el artesano años atrás. No todos claro esta, pero seguro que este talento de alguna manera si se transporta de una época a otra y de un medio artístico a otro.

Existe un talento, una mina, un filón, llámese como se quiera, para la animación en el realizador nariñense y es importante que se fortalezca. A través de procesos de formación y de divulgación en esta area, la animación, el 2D, el 3D, Flash, Stock Motion, entre otras. Un próximo diplomado de la Universidad de Nariño o de otra institución en el area audiovisual podría incluir el area de la animación y obtendría seguramente resultados a corto y largo plazo satisfactorios. Es sencillo intuir que la animación muy seguramente seguirá entregando reconocimientos a Nariño en el audiovisual en el futuro. No esta de más reseñar que de las 6 animaciones mencionadas 5 provienen de la Facultad de Artes de la Udenar y 4 de estudiantes del Programa de Diseño Gráfico.

Vale la pena detallar la obra que ya alcanzan algunos realizadores en Nariño, los sembradores de las montañas que se observan en el panorama audiovisual de esta región. Nombres como Juan F. Cano en lo experimental y el video arte. Gustavo Montenegro y Juan Carlos Santacruz o Victor Hernández en el documental. Diana Moreno, Freddy Guerrero, Carolina Solarte, Alvaro De la Cruz, Dario Villota, Juan Esteban Cabrera y el mismo Victor Hernández en la ficción. Todos ellos en el campo del cortometraje y la ficción, sin embargo detallar estas obras fílmicas en video en su totalidad será un trabajo para otra ocasión.

El Público y sus Exhibidores

En Nariño existen espacios quizás limitados, es cierto, pero existentes para el cine comercial y el cine no tan comercial. Por parte del cine no tan comercial existen espacios semanales en Pasto como Aleph Cinema con ciclos sobre autores, géneros o temáticas en la Sala Aleph Teatro. También existen cine clubs universitarios como Cine Club Ocho y Medio de la Facultad de Artes de la Udenar con ciclos relacionados con temáticas cercanas al arte, como la música o temáticas de géneros cinematográficos. En la Biblioteca Pública de los Barrios Surorientales Cineztesia presenta ciclos para público infantil y para públicos juveniles y adultos con periodicidad mensual. Mensualmente existe el Cine Club Cineapolis de Cinco Sentidos Modep con temáticas sociales. Existen también jornadas de proyección de cortometrajes y películas no periódicas en la Casa de la Cultura de Ipiales. En el municipio de Sandona desde 2010 existe el Cine Club Cenit con películas de autor semanalmente.

Existe también el espacio anual del Festival de Cine de Pasto en el mes de agosto que busca prolongar sus exhibiciones durante todo el año a través de diferentes muestras temáticas e itinerantes en todo el departamento de Nariño. Un ejemplo de ello es promover que la Semana del Cine Colombiano visite Pasto en octubre mediante su coordinación en esta ciudad. En 2010 asistieron 1.100 espectadores a los 5 días de proyección del Festival.

De acuerdo a cifras proporcionadas por los cine clubistas en 2010 los espectadores a los diferentes cine clubs mencionados en Nariño llegan a 2.500 asistentes aproximadamente.

En el campo del cine comercial existen 6 salas de cinemas en Pasto, 3 en Cinemas O.T. (Antiguamente Cinemas Valle de Atriz) y 3 en Cinemas Éxito, ambos administrados por Royal Films. De acuerdo a datos aproximados sus espectadores llegan a 160.000 en 2010. En otras ciudades del departamento como Ipiales no existen salas de cine comercial actualmente, aunque sí existen algunas proyecciones aisladas en algunos teatros de la ciudad. Igualmente no existen salas de cine comercial en otros municipios del departamento.

Por Cineztesia Pasto 
Como parte del Consejo Departamental de Cinematografía y Audiovisuales de Nariño

Este texto fue expuesto durante el I Encuentro del Sector Audiovisual Nariñense “Para Vernos Mejor” organizado por el Fondo Mixto de Cultura de Nariño y el Ministerio de Cultura entre el 3 y 4 de septiembre de 2010.  

Imágenes facilitadas del Archivo del Festival Internacional de Cine de Pasto.